Seguimos con la cerveza Isleña, esta vez con una edición que
nos ha traído al mundo del coleccionismo de cabeza, ya que ha sido en algunos
casos bastante difícil de conseguir.
Esta edición nace de
la idea del Club Blue Marlin, que decide personalizar la botella con un diseño.
Blue Marlin respeta el blanco característico de la marca y el logo con
el cuello de la botella, personaliza la parte central el nombre del club.
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